Cuando decoramos los distintos ambientes pensamos en su estilo, en la paleta cromática y tenemos en cuenta su practicidad, mientras que al decorar las habitaciones debemos proyectar las labores a la inversa: lo visual al servicio de lo funcional.
La comunión entre padres y adolescentes no suele ser de las mejores, y para ponerse de acuerdo en la decoración de su cuarto, habrá que negociar y plantear pautas.