Además de elementos y objetos representativos de la cultura, en el estilo decorativo chino la presencia del color es fundamental. Sin embargo, cada tono tiene una cierta influencia en nuestros sentidos, causando emociones y sensaciones de lo más diversas, desde la inspiración creativa hasta el relax, desde el ímpetu energizado y vigorizado hasta la intimidad familiar.
En el estilo decorativo chino hay tres colores fundamentales: el amarillo, el rojo y el blanco. Cada uno posee su ambiente prioritario, su significado y su influencia, como veremos a continuación:
Es el más noble de los colores de este estilo decorativo. Antaño, era el color permitido sólo a los emperadores y príncipes, simbolizando el poder y la prosperidad por su relación a la agricultura. El amarillo se utiliza pleno o en un tono metalizado (el dorado).
Este color simboliza la prosperidad de la tierra, por lo que es elegido para atuendos, tapicerías y también para pisos y plataformas, en simbología a la tierra. Es el color de la paciencia, de la tolerancia y de la sabiduría, una fuerza de energía positiva y vigorosa, utilizada para simbolizar la buena acción, la perseverancia y la fiabilidad. También se lo utiliza en la decoración para contrarrestar las ansiedades y los miedos (pues simboliza la luz y el sol).
Es el color de la buena suerte, del progreso, de la belleza y de todo lo positivo, una energía fuerte tan bien apreciada que, incluso, los trajes tradicionales chinos de novias lucen este color.
Es el color de la felicidad, de la fuerzas, y también de la fama y la buena apreciación. Representa al amanecer, a la energía total del universo, a la estimulación, y es de muy buen augurio.
Su dirección es el sur; su estación es el verano; su energía es la expansión; su planeta es Marte; su fruto son los albaricoques y cereales; su animal son las aves de corral; su sabor es el amargo y el aroma es a quemado.
Es el color del luto, y simboliza el fin, la extinción, la rectitud, y también la pureza. Representa a la muerte y a los espíritus ancestrales, contrarresta la pena y da valor en la tristeza. Es el color de la intuición y de la organización, y también de la confianza.
Su dirección es el este; su estación es el otoño; su energía es la contracción; su planeta es Venus; su fruto son los melocotones y el cáñamo; su animal son los tigres y todos los de pelaje; su sabor es el picante, y el aroma a podrido.
El café es el color de la nostalgia y de los recuerdos. Es un color que brinda sensaciones de seguridad, de estabilidad y de equilibrio, y es el tono que representa al paso del tiempo. Es el color que se utiliza para aportar la sensación de perdurabilidad, simbolizando la profundidad de las raíces de los árboles (de las maderas).