Son variadas las tendencias en que se nutre la decoración de estilo oriental, pero todas constituyen un espacio armónico y relajado, con simpleza de formas y detalles ornamentales. Este tipo de ambiente invita al descanso, a la relajación y a la meditación.
Un conjunto elegante y austero en el color, la forma y el contenido, se obtiene con la decoración de un ambiente al estilo oriental, ya sea minimalista japonés, hindú, o inspirado en las noches de Arabia.
La decoración la puedes realizar al estilo minimalista japonés o zen, y en este caso, deberás utilizar colores neutros. Elige el blanco, crema o un gris tenue para las grandes superficies, como muros o paredes.
Opta por un piso de madera o el recubrimiento con bambú o esterilla. Coloca sobre él una mesa baja con almohadones al estilo del comedor japonés.
El mueble que deberás usar para una decoración con estilo oriental será de línea sencilla y moderna, y puedes adoptar también el mueble rústico o artesanal de línea simple.
El complemento de la decoración oriental será un objeto único, muy pocos objetos o la línea de objetos de igual forma. Para ello puedes usar una tela estampada con caligrafía.
Utiliza también cortinas de papel, luminarias de papel, abanicos y arreglos de ramas y flores.
Para la organización del espacio oriental, es recomendable que te bases en los principios del Feng Shui, pues es una guía correcta para que puedas llevar a la práctica este estilo, además de que gozarás de los beneficios de ese arte milenario.
La decoración India aportará a tu ambiente una explosión de color, en contraste con el estilo japonés. Los tonos predominantes son cálidos, de la gama de amarillos, naranjas, terracotas, púrpuras y violetas. Combina toda la paleta para hacer un conjunto armónico, teniendo cuidado de que no resulte excesivo. Pon algunos cojines de tela hindú, imágenes, tapices y cortinados vaporosos.
En el dormitorio, reforma la cama y adhiérele un dosel, utiliza alfombras combinadas con cortinados coloridos, pues una habitación hindú rebosa sensualidad y misticismo. Haz una combinación perfecta con candelabros, lámparas colgantes e incensarios.
Para disfrutar de una habitación árabe, inspírate en los cuentos de Las Mil y una Noches.
El color predominante es claro, tendiente a reflejar la luz, y el estilo, rústico y elegante.
El detalle que reafirma el género es la estructura de las aberturas con forma de mezquita, las ricas telas de seda, los jarrones laqueados brillantes y los cortinados en colores.
Coloca mesas muy bajas, alfombras orientales y almohadones redondos, estampados, con borlas y encajes brillantes.
No utilices demasiados objetos decorativos en las paredes, a lo sumo instala una lámpara de luz hacia abajo, una lámina, un tapiz con caligrafía o unos pocos objetos de cerámica o vidrio.
Sea cual sea la decoración que elijas para tu casa, recuerda, el paso más importante es la planificación, el dibujo del diseño y la combinación de textura, forma y color.
En la decoración de interiores la clave es lograr armonía, sin importar que adoptes tal o cual estilo a rajatabla; por eso con buen gusto, puedes hacer tus propias combinaciones y llegar a una decoración personal con aires de Oriente.