Ya sea el hall de entrada de un edificio, de un complejo de oficinas, de un local comercial o de una casa, el vestíbulo o la sala de espera es la primera impresión que recibe quien entra al lugar, y por ello es bueno decorarlo con buen gusto y calidez, plasmando el estilo del resto de la casa, para que los visitantes tengan una impresión agradable y se sientan cómodos y bienvenidos.
En la decoración de la sala de espera o hall de entrada debe primar la sencillez y también la elegancia. Se trata de que sea una pequeña muestra del estilo que se verá a continuación, una vez que se ingrese al edificio, local o residencia privada. Por ello, la primera regla debe ser no llenar el lugar con objetos, sino mantenerlo despejado y sutilmente decorado, con buen gusto y naturalidad.
Comienza pensando cuál será la función del vestíbulo. ¿Allí esperarán las visitas, será un lugar de paso, se sentarán a tomar café? Todo esto debes tenerlo en cuenta para planificar el lugar que ocuparán los muebles y objetos que sean necesarios, tales como percheros donde colgar los abrigos, sillones confortables, mesas ratonas con revistas para hojear, una maquina de café, objetos que aporten serenidad al ambiente y lo hagan apto para largas esperas.
Una vez que tengas una idea clara de la función que cumplirá y el lugar de los muebles y objetos, piensa en la decoración siguiendo el estilo que has elegido para el resto de la casa o el local comercial.
En el vestíbulo puedes colocar algunos objetos para darle vida y carácter a la habitación.
Puedes elegir entre algunos de los siguientes (3 o 4, para no recargar el espacio):
Un objeto de arte, una o dos plantas, un jarrón con flores o un arreglo floral ikebana, un espejo, un bressoir, cojines, un porta paraguas, diversos objetos ornamentales que pueden ser cuencos en cerámica, imágenes, un topiario, esferas decorativas, un jardín japonés en miniatura, una pieza antigua, un candelabro con velas, botellas de cristal de colores y formas, juegos de madera para amenizar la espera, un revistero con revistas y catálogos, etc.
Por último, mantén el lugar siempre limpio y despejado, aireado y bien iluminado con luz natural, pues es la regla principal para que las visitas se sientan cómodas y no les pese el tiempo que deberán esperar.