Decorar una casa nueva, o re-decorar la vivienda actual, es una tarea excitante: tantas cosas nuevas que queremos poner en ella, tantos cambios que queremos hacer… y tan poco dinero para gastar. Si necesitas renovar tu casa con un presupuesto ajustado, estas ideas pueden resultarte de utilidad.
Antes de comenzar a decorar, planifica los cambios que quieres hacer en cada habitación, o cómo quieres que sea. Lo ideal es elegir un tema o estilo unificador en toda la casa, y tratar de que sea algo sencillo (y hasta rústico), que se pueda resolver con pocos elementos y muebles simples. Por ejemplo, si te decides por un papel tapiz con estampado geométrico para una pared de tu sala, los restos podrás usarlos para crear guardas o forrar estantes en el cuarto de trabajo, o en tu dormitorio, y hasta en la cocina.
Una única gama de colores también ahorra dinero, ya que el color base será uno solo, y luego irás modificándolo según el ambiente. Obviamente, el blanco es económico y unificador, y te permite poner el acento de color en los detalles, lo que te simplifica mucho la decoración. Recuerda que a veces lo barato sale caro: una pintura muy económica requerirá, con seguridad, más manos de pintura que una más cara. En ese caso, el ahorro no cumple su propósito.
No gastes en costosas alfombras. Los pisos se pueden pintar para renovarlos, con pintura especial. Y puedes agregar carpetas en ciertos sectores que puedes hacer o comprar.
No compres muebles nuevos a menos que sean realmente necesarios. Puedes reciclar un mueble para ponerlo en otra habitación: lo pintas de un color brillante, le cambias los herrajes, y ya tienes una pieza totalmente diferente.
Las sillas y sillones parecerán otros sólo cambiando o agregando una funda. Camisetas, vestidos, suéteres y hasta pantalones en desuso sirven para las fundas de sillas y almohadones. Hasta las lámparas pueden renovarse, con pintura y una nueva pantalla.
Recorre las ofertas de las tiendas online de muebles usados. Encontrarás muebles muy baratos, a los que puedes renovar tú misma. Sólo debes verificar que se encuentren en buen estado. Si vas a comprar un sillón usado, revisa la estructura principal, que es lo que verdaderamente importa. El tapizado es siempre reemplazable.
Vende los muebles que definitivamente no quieras conservar, y todo aquello en desuso que ocupe lugar en tus armarios. Con el dinero podrás comprar muebles o accesorios que necesites.
Si quieres atenerte a un presupuesto y no gastar de más, lo mejor es comprar en efectivo. Las compras con tarjeta de crédito resultarán en intereses que aumentarán el gasto. Y muchas veces, si pagas en efectivo conseguirás descuentos importantes en las tiendas.
