Ya hablamos del estilo kitsch en la decoración, y si bien se caracteriza por la mezcla de colores, texturas y épocas, el kitsch actual tiende a hacer lo mismo pero, como se acostumbra decir, con diseño, con mucho diseño. Es decir, que la mezcla ya no es aleatoria sino muy cuidada, y pensada al detalle.
El principio de combinación de elementos no-combinables se mantiene, pero se limita un poco en vista de lograr un efecto alegre y distendido pero, a la vez, armónico y de buen gusto (más allá de que las preferencias personales pueden no ser compatibles con esta decoración). El kitsch de diseño se acerca al pop, sin llegar a serlo totalmente, y es algo así como una unión que pretende ser transgresora, de moderno con antiguo (o, más que antiguo, de los años ’60 y ’70).
Encontraremos mezclas extravagantes de colores, pero sin exagerar: si una pared tiene un papel tapiz a lunares o rayas anaranjadas, violetas y turquesa, seguramente el resto de las paredes estará pintado de blanco. Para la decoración podemos optar por cuadros pop, posters de películas como Grease o Saturday Night Fever, o alguna reproducción de Andy Warhol o Liechtenstein. Los espejos tendrán marcos muy trabajados, dorados a la hoja.
Si el tapizado de los sillones es liso, estará cubierto por almohadones fosforescentes, con forma de caramelo, rosas de tul y borlas. Las lámparas de pie de los años ’60, con pantallas de colores, combinarán con cortinas lisas. Si tienes una repisa o biblioteca, busca en los mercados de pulgas algún objeto curioso o raro para decorar. Si quieres ir un poco más allá, mezcla con fotos familiares. Recuerda que todo está permitido en el kitsch, el límite lo impone tu zona de confort.
Puedes tomarte muchas libertades con las sillas de comedor o cocina: si consigues todas sillas diferentes, en madera, y las tapizas o las cubres con almohadones estridentes, habrás añadido un toque kitsch sin exagerar.
Como ves, si bien el estilo kitsch es sinónimo de exageración, también puedes adaptarlo y moderarlo, eligiendo colores y objetos correspondientes a este estilo, e incluyéndolos en una decoración más tradicional.