Si te entusiasman los proyectos de bricolaje para el jardín, este artículo es para ti.
Una pérgola es uno de los elementos más bonitos que puedes tener, pues es una estructura que te brindará sombra y las plantas se treparán a ella haciendo de este rinconcito sombreado un sitio encantador para relajarte y sentarte a disfrutar de las plantas, las flores y el aire fresco.
La estructura de una pérgola es de cuatro columnas y una zona techada, pues de esta forma te puedes sentar debajo de ella y tener una vista de todo el jardín. Tanto las columnas como el techo se hacen de varillas de hierro o madera, de forma que las plantas trepadoras puedan subir con facilidad y cubrir toda la estructura.
Construir una pérgola no es un trabajo simple, pero si pones todo tu empeño y logras hacerlo te sentirás muy satisfecho, y seguramente la disfrutarás mucho.
Lo primero que debes hacer es elegir el sitio adecuado donde colocarla; este lugar debe ser plano, debe darte un panorama completo del jardín y, si no vas a colocar en ella plantas trepadoras, tener algo de sombra, pues la pérgola por sí misma no la proveerá.
El segundo paso es elegir los materiales a utilizar y conseguir las herramientas adecuadas. Si bien puedes construir tu pérgola en hierro, el método más sencillo es hacerla de madera, la cual debe ser dura para que resista el agua y los cambios del clima.
El tercer paso en la planificación es hacer un diseño de la estructura. Procura que sea simple para facilitarte el trabajo, consulta con un experto o busca diseños en la web o en revistas de decoración.
Además de la madera necesitarás cemento, arena y piedras para hacer los basamentos, y también tirafondos y una llave para unir las tablas de la estructura. Un martillo, un metro de carpintero, una pala, una escalera, una carretilla, un nivel de carpintero, una paleta de mezcla y equipo de protección para construcción serán los materiales que necesitarás.
Por último, un protector para madera o barniz, sin brillo o brillante, dependiendo del aspecto que quieras que tenga la pérgola.
Una vez que hayas terminado con la construcción de tu pérgola, puedes plantar trepadoras en la base de las cuatro columnas para que se eleven por la estructura, te den sombra y aromáticas flores. Puedes elegir entre rosas, rosas petit mini, jazmines, glicinas, una parra u otras plantas adecuadas al clima y a las condiciones que tenga tu jardín.