Llega el momento de planificar una velada especial. Una deliciosa cena, una bella disposición de la vajilla, y las luces un tanto atenuadas. Nada mejor que una decoración con velas para complementar este paisaje hogareño especial.
El primer paso es adquirir un generoso paquete de velas de noche. Estas son las pequeñas velas redondeadas y de baja estatura, utilizadas para lámparas, farolas y hornitos de aceites y esencias. Estas velas son ideales, pues su reducido tamaño permite colocarlas en numerosos sitios y elementos de contención, previniendo accidentes variados.
Luego de contar con tantas velas como desees, procura tener a mano una bolsa de arena o de sal, sin importar si es sal fina, gruesa o parrillera. Utilizaremos la arena o la sal para crear colchones de apoyo, evitando así que la base metálica o el calor de la vela arruine o marque los elementos. También, estas camas de arena o de sal previenen que la cera que se pudiera escurrir se apoye sobre las superficies y elementos, dificultando luego su limpieza.
Toma pequeños platos y compoteras y coloca una base de sal o de arena fina. Debe tener una altura de un centímetro, para crear una buena aislación. Sin embargo, si colocas un colchón más generoso, podrás ensartar dentro de la sal o de la arena pequeñas varillas, creando un perímetro para la vela. Así, este simple decorado tomará un aspecto mucho más especial.
También puedes usar vajillas clásicas. Toma tazas de té bien vistosas, coloca un poco de sal o de arena fina, y una vela de noche dentro de la tacita. Ponla sobre su correspondiente plato, en pares, y coloca la bandeja del servicio de té en una mesa auxiliar. Nuevamente: un punto elegante, romántico y especial, sin preocuparnos demasiado por ello.
También las copas, elegantes y vistosas, son excelentes contenedores para velas. Simplemente coloca un poco de sal o de arena fina (incluso puedes darle color con colorantes vegetales) dentro de una copa de cava o de vino, y dispón una vela dentro. Si la copa es de color, pues mucho mejor.
Puedes convertir una simple copa en un velador o candelabro especial. Toma vasos descartables decorados (puedes pintarlos, o elegir vasos ya decorados) y retírales su base. Luego, coloca sal o arena dentro de la copa, coloca dentro la vela, enciéndela, y simplemente coloca el vaso por encima, dejando la boca ancha hacia abajo. Obtendrás un singular velador con pantalla en segundos, que difuminará la luz de la vela de un modo mucho más especial.
Al respecto, puedes crear tus propias pantallas para veladores con copas. Toma un simple vaso plástico descartable, humedécelo con cola escolar (usando un pincel o esponja) y ve colocando pequeñas piezas de papel de seda de colores o blanco, a tu elección. Procura no encimar demasiados papeles, para que la luz pueda emitirse con mayor intensidad. Luego deja secar, y retira el papel del vaso, para repetir la operación y crear así tantas pantallas como quieras.