Si colocas una copa llena de champagne y a su lado una vela de gel, seguramente no puedas distinguir cual es cual, a no ser que veas el pabilo, o que la vela se encuentre encendida.
Y es que las velas de gel en copas de champagne son muy reales y hasta las burbujas que se forman simulan las de la bebida.
Se trata de un elemento decorativo muy elegante, ideal para alumbrar la mesa de una cena, un cocktail o una recepción formal.
Materiales:
Pon el gel para velas dentro de una cacerola y ponla a fuego lento hasta que se empiece a derretir, revolviendo el gel lo menos posible. Agrega un poco de colorante amarillo, lo suficiente para lograr un color champagne. Para determinar si has llegado al color justo, toma un poco con una cuchara, viértelo sobre una hoja de papel blanco grueso y espera que se seque. En ese momento, puedes agregar algunas gotas más de color o agregar más gel si notas que el amarillo es demasiado intenso.
Vierte el gel dentro de las copas, introduce unos milímetros el pincho de madera y muévelo suavemente para crear burbujas que simulen la espuma del champagne. Una vez que estés satisfecho de cómo se ve el líquido, coloca la mecha en el centro de la vela de modo que no toque el fondo de la copa, pues de esta forma podría calentar el vidrio y hacer que estalle. Deja que el gel se endurezca varias horas antes de encender la vela.
Para hacer que el gel se endurezca más rápidamente, puedes colocar las velas dentro del refrigerador. Una vez que estén listas, decora las copas con una cinta u otros elementos que combinen con la decoración de la fiesta.
Decorar las copas puede ser un recurso muy interesante para lograr bonitos centros de mesa para una boda u otro acontecimiento especial.
