Si pensamos en maceteros para colgar, la primera imagen que nos viene a la mente son los clásicos porta macetas tejidos de hilo sisal, pero hay varios modelos que son muchos más modernos, e incluso se pueden hacer con materiales reciclados, logrando bellos maceteros para las plantas colgantes sin necesidad de invertir dinero en ellos.
Una forma sencilla de hacer macetas para colgar es empotrar en las paredes cajas de madera y colocar en ellas las plantas. Esto se hace agujereando la pared, colocando un taco Fisher y atornillando la caja de forma que quede bien firme. Luego, se coloca la tierra y la planta colgante. Otra forma es fijar la caja a un trozo de madera con dispositivos para colgar y colocarla en la pared, sobre dos ganchos en L.
Las canastas de fibras soportan bien la humedad de la tierra de las plantas , además de que el resultado es sumamente decorativo. Para ello, lo único que tienes que hacer es colocar la planta en la canasta y colgarla de un gancho en el techo del porche o de uno fijado en la pared.
Si tienes en casa recipientes plásticos para reciclar, también puedes hacer con ellos maceteros colgantes. De esta forma, le estarás dando una utilidad práctica a los objetos de desecho y logrando un objeto decorativo hecho con tus propias manos.
Puedes hacer un macetero colgante usando una botella plástica cortada y decorada con diversas técnicas artesanales, como decoupage, mosaico o un revestimiento rústico de enduído o yeso. Luego, agujereas el contenedor, le colocas la planta y lo cuelgas usando rafia, hilo sisal, cinta o lo que mejor combine con la decoración.
Para hacer una maceta colgante reciclada, usa una de terracota, una lijadora, una tabla de madera y adhesivo termostático. El proceso es sencillo, simplemente tienes que lijar la maceta en uno de sus lados y pegarla a la madera usando el adhesivo caliente, única forma de que quede bien firme y que no se despegue. Luego, agrega a la madera un gancho, pon la planta y ya tienes lista una maceta para colgar realmente original.