¿Estás buscando una manera fácil, rápida y económica de renovar tus espacios? Pues no estás soñando con lo imposible. Se puede cambiar la apariencia de toda una habitación, tan sólo dando un toque casi mágico a su estructura, en especial las paredes, aunque también puedes atacar los techos y pisos con igual determinación.
En esta nota veremos algunas maneras sencillas y muy económicas que te permitirán renovar el aspecto de tus habitaciones y espacios, simplemente cambiando el aspecto de sus paredes. Originalidad, creatividad, personalidad, y bajo presupuesto.
Todos sabemos que la manera más sencilla de renovar una pared es aplicando una nueva capa de pintura, ya sea en el mismo tono actual o en otro color. Pero ello no significa que no puedas dar algunos toques más creativos. Por ejemplo, puedes rebajar pintura acrílica o látex a punto tinta (agregando agua) y aplicando en la pared, cubriendo el sector inmediatamente con una bolsa plástica abierta. Presiona sin arrastrar tus manos, y retira la bolsa en una dirección. Trabajando por pequeños sectores, lograrás una textura única con una bolsa de supermercados.
También puedes aplicar numerosas técnicas de pintura decorativa, como esponjeado, esténcil o moldes, e incluso puedes practicar tu mano con el pincel y plasmar en tus paredes murales auténticos y de autor, dejándote llevar por tu propia inspiración. Si aplicas pintura esmaltada o sintética y rocías con alcohol aplicado con un pulverizador, también lograrás una apariencia única, al igual que si rocías agua sobre las pinturas látex frescas. Crearás tu propia técnica decorativa especial, en minutos y con poca pintura.
El papel tapiz o papel mural es una gran solución para renovar un ambiente. Simplemente despejamos la pared, la cepillamos para eliminar suciedades adheridas, y encolamos las tiras del papel elegido. Luego de colocarlo en su lugar, repasamos con una espátula o cepillo para eliminar las burbujas de aire que pudieran haber quedado atrapadas, y procedemos a la siguiente tira del papel decorativo especial. En el mercado podrás hallarlos de diversos materiales, incluso plastificados, y en una enorme variedad de colores, diseños y estilos.
Pero cuando hablamos de ser creativos a la hora de decorar, debemos explorar otras alternativas. Una de ellas es empapelar la pared con otros elementos, también de papel. Puedes comprar libros fallados o usados y separar sus hojas, recortando los márgenes, y empapelar una habitación o crear una singular guarda con estas páginas de libros. El papel periódico también es una gran alternativa, pues es mucho más económico y simplemente debes plastificarlo para protegerlo por años. No descartes aquí ninguna idea. Páginas de revistas, papeles de regalo y envoltorios y hasta telas endurecidas pueden ser tu material de trabajo en esta técnica especial.