La esfera es la forma energética más eficiente de la naturaleza. También, para nuestra buena fortuna, es una figura muy estética que podemos aplicar sin temor en casi cualquier estilo decorativo. Ya sea minimalista o natural, ecléctrico u oriental, cualquier estilo puede ser complementado con ese toque especial de las esferas en cualquier rincón.
En esta nota aprenderemos algunas buenas y sencillas maneras de hacer bolas decorativas, para que puedas crearlas completamente personalizadas a tu gusto, y de acuerdo con el estilo y la ambientación general de tu hogar.
Puedes hacer bolas con fibras naturales e hilados muy fácilmente. Necesitas una esfera de base, del tamaño que prefieras, que inflas y luego ponchas. Para hacer estas bolas utilizaremos globos de agua, inflables comunes, o bien grandes piñatas. Infla el elemento de base hasta el tamaño que quieras dar a cada bola. Humedécelo con aceite vegetal en aerosol o con una toalla de papel embebida en aceite de cocina, apenas, para facilitar el despegado.
Luego, comienza a enrollar los hilos o las fibras elegidas. Puedes usar lanas, hilos de crochet, hilo sisal, rafia, piolas de algodón o el hilado que prefieras. Para comenzar, sujeta el hilo con un dedo y enrosca la piola con la otra mano. Cuando tengas suficientes vueltas, el hilo se mantendrá por su cuenta.
Cuando ya hayas cubierto el globo de la manera que prefieras, anúdalo para fijarlo y prepara la solución endurecedora, mezclando una parte de cola (cola escolar o cola de carpintero, también pegamento de empapelar servirá) por una parte de agua templada. Pincela abundantemente sobre el hilado, luego deja secar, y aplica una nueva capa. Puedes dar color con pintura acrílica, témpera, acuarela o colorante vegetal. Una vez bien seco, poncha el globo con un alfiler y retira la goma del interior de la esfera.
Las pastas para modelar y el papel son otras buenas soluciones. Partes de una esfera de base, como una bola de telgopor o isopor, una bola de plástico, una pelota de tenis, un globo de agua o lo que prefieras, en el tamaño elegido. Luego, simplemente coloca la masilla estirada o de a pequeñas porciones, creando texturas interesantes.
También puedes recubrir la bola con papel sanitario cortado con las manos, pincelando con solución endurecedora (cola y agua). Pinta con acrílicos y ceras para dar color y brillo, imitando texturas de piedra, mármol o la que prefieras.
Corta círculos de papel, y luego divídelos en dos semi círculos. Enróllalos para lograr pequeños conos, sujetándolos con cola escolar o con cinta adhesiva por su punta más angosta. Luego, simplemente une unos con otros los conos, pegándolos con cola por su parte más angosta. La inclinación de sus laterales, al unirlos, creará una bola muy decorativa, que puedes hacer en sólo minutos con una gran variedad de materiales.
Para hacer bolas naturales necesitas ramas verdes y delgadas. Puedes usar ramas de sauce, sauce eléctrico, o cualquier varilla verde flexible. Procura que sean suficientes, al menos para dar dos vueltas a la forma de la esfera que quieras crear, de acuerdo a su tamaño.
Luego, tomando un globo como base, comienza a enroscar las ramas alrededor, sujetando unas con otras enroscándolas entre sí. Puedes prescindir del globo cuando adquieras algo de práctica en la labor. Luego, deja secar por unas dos a tres semanas en un sitio seco y ventilado, y ya tendrás listas tus bolas decorativas naturales.
