Para una biblioteca o sala donde se lee es difícil imaginar una decoración que no esté relacionada a los libros, al arte, los cómodos sillones y una buena iluminación, porque ¿qué más se puede necesitar en una biblioteca?. Con estos elementos y con otros sumamente necesarios (como una estufa a leña para el invierno o una moderna mesa de té) se puede crear un espacio relajante y acogedor donde sentarse a leer o a estudiar.
Los libros siempre pueden verse bien, ya sea que se cuente con una habitación para usar como biblioteca o estén en un armario biblioteca en la sala. Quienes aman los libros no suelen molestarse porque ellos ocupen las sillas, mesas y repisas de toda la casa, pero siempre es bueno tenerlos organizados para poderlos ubicar rápidamente, cuidarlos y decorar la habitación con ellos.
Los armarios biblioteca que van de pared a pared son hermosos, permiten mantener todos los libros a mano y siempre habrá lugar para una pieza de arte, estatuilla, antigüedad u objeto decorativo, sin embargo, hay varias formas de tener los libros organizados sin apilarlos uniformemente en la pared.
Expositores de madera como los que usan las tiendas permiten tener algunos de uso regular siempre a mano. Las mesas bajas centrales pueden tener un estante inferior donde guardar las temáticas preferidas, y otros muebles se adaptan para contener libros, como las camas altas con estantes en la parte inferior para el dormitorio.
Según las condiciones del espacio, los estantes para libros de diseños modernos e innovadores permiten decorar la biblioteca o cualquier ambiente similar.
La iluminación en la biblioteca o en una sala donde se lee es muy importante, ya que la luz insuficiente provoca fatiga visual.
Lo ideal es la iluminación natural durante el día, por lo tanto es bueno colocar los sillones o mesas de lectura sobre las ventanas o cerca de ellas. En la noche, cuando es necesario el uso de luz artificial, siempre es bueno usar lámparas que envíen la luz hacia las páginas del libro, como una lámpara sin difusor, y otra luz central difusa que alumbre la habitación.
Los accesorios para las bibliotecas son funcionales, a excepción de algunos detalles decorativos que pueden ser cuadros o esculturas artísticas, afiches y elementos para hacer más acogedor y relajante el ambiente. Los muebles cómodos, las alfombras, las estufas, los trofeos o recuerdos de familia son los elegidos para decorar el entorno confortable de una biblioteca.