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Versión para imprimir del artículo Cómo hacer tus propios cuadros grabados. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Una forma simple y moderna de decorar un espacio es colgar de las paredes grabados, que pueden ser copias de afiches o reproducciones de dibujos o diseños famosos. Motivos simples y bonitos para hacer un grabado pueden ser un diseño tribal, un cuadro abstracto o un dibujo sencillo, como por ejemplo la paloma de la paz de Pablo Picasso.
Hay varias técnicas para hacer grabados, y entre las más populares se encuentra la Serigrafía. La Serigrafía requiere de un equipo completo, de un cuarto oscuro de revelado y del conocimiento de la técnica para que el resultado sea bueno, sin embargo, existe una técnica de Planograf sencilla que es anterior a la Serigrafía, y que se puede utilizar para hacer varias copias de un mismo dibujo.
Materiales:
Papel manteca
Cemento de zapatero (no cemento de contacto)
Tóner color verde
Pincel
Cúter
Nafta
Un bastidor con tela de monyl
Una racleta (espátula de goma para serigrafía)
Pintura serigráfica
Diluyente
Reproduce el dibujo que quieras grabar en la hoja de papel manteca, ya sea imprimiéndolo, calcándolo o dibujándolo a mano alzada.
Agrega al cemento de zapatero unas gotas de tóner verde para lograr un tono suave. Añade también unas gotas de nafta para diluir el cemento. Toma la hoja de papel manteca, extiéndela sobre la mesa y píntala con el pincel y el cemento de forma horizontal, siempre hacia el mismo lado, y deja que se seque.
El paso siguiente es aplicar una segunda mano de cemento de zapatero, esta vez de forma vertical. Deja que seque nuevamente y aplica una tercera capa horizontal. Nuevamente, deja que el cemento seque, esta vez varias horas antes de continuar con el trabajo.
Pon la hoja de papel manteca pintada con cemento y recorta con el cúter bien afilado el contorno del dibujo. Ten en cuenta que debes quitar del papel las zonas donde quieras que pase la tinta, es decir, debes hacer un diseño en negativo.
Pon el dibujo recortado al revés sobre la mesa de trabajo (la parte del cemento hacia abajo) y sobre éste el bastidor de madera forrado con tela de monyl (de modo que el monyl toque el papel del dibujo).
Pon un poco de pintura de serigrafía dentro del bastidor y pasa la racleta extendiendo la pintura. Esto logrará que el dibujo se adhiera sobre el bastidor. Limpia el bastidor de pintura y ya estará listo para comenzar a hacer el grabado en Planograf.
Para hacer el grabado, levanta el bastidor y coloca debajo la tela, el cartón o el papel que quieras imprimir. Pon un poco de tinta para serigrafía sobre el bastidor y pasa la racleta extendiendo la pintura.
Quita la hoja o tela impresa, coloca otra hoja o tela y vuelve a imprimir. Haz este procedimiento para imprimir todos los grabados que desees.
Una vez que hayas terminado, limpia el bastidor con un diluyente de pinturas serigráficas.
