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Versión para imprimir del artículo Una estantería decorada con recuerdos. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Si pensamos en decorar el hogar con fotografías y recuerdos, automáticamente los imaginamos en marcos colgados en la pared o reposados sobre muebles y estantes. Pero hoy veremos una manera aún más especial de conservar estos bellos recuerdos constantemente, bien protegidos y siempre a la vista: crearemos una estantería con ellos.
Lo primero es reunir tus materiales. Toma todas las fotografías, cartas escritas, notas, recuerdos, tickets del cine o entradas a aquel recital que quieres preservar y lucir con orgullo. También necesitarás lo siguiente:
Cartón (de preferencia gris),
Papel film de cocina o papel de plástico (o cinta adhesiva de embalar)
Cinta adhesiva de papel,
Aceite en aerosol (también puede ser líquido o desmoldante para velas y jabones)
Un contenedor de plástico o vidrio
Espátula plástica
Cantidad necesaria de resina y catalizador (al 5%).
Para preparar los elementos, preservándolos incluso de la humedad propia de la resina preacelerada, necesitas barniz en aerosol, bolsas de nylon y dos maderas para hacer peso y secar los elementos a presión, dejándolos bien planos y derechos.
Finalmente, consigue un taladro o perforadora con una mecha adecuada, cuatro sectores iguales de caño roscado del largo que prefiera,s para la separación de las estanterías entre sí, tornillos, arandelas, y manguera para cubrir el caño roscado, que puedes usar al natural o pintado del color que prefieras, usando para ello esmalte sintético o pintura en aerosol (tanto para la goma como para el caño).
El primer paso es seleccionarlas, y luego disponerlas sobre una tela plástica, bolsa del mercado o papel film de cocina. Aplica una capa de barniz en aerosol incoloro. Deja secar a la perfección, da vuelta las cartas, fotografías o de lo que se trate, y aplica una nueva capa de barniz en aerosol. Puedes dar dos capas de cada lado, para mayor impermeabilización.
Luego, deja secar (procura que queden estirados y planos), y coloca entre dos caras de bolsa de plástico y entre dos maderas, o bien sobre una mesa con peso encima. Deja allí toda la noche, para que las incrustaciones queden bien planas.
Para hacer el marco en el que crearás cada estantería, coloca tiras de cartón de dos centímetros de alto en torno a una base de cartón del tamaño que quieras dar a tus estantes, a modo de pequeño cajón o bandeja de cartón. Ya armado y sujeto con cinta adhesiva, cubre todo el interior y los laterales (por dentro) con cinta adhesiva, papel film o una bolsa plástica, bien estirada, pues si quedaran pliegues se marcarían en la estantería.
Con las incrustaciones planas y el marco listo, prepara la resina agregando un 5% de catalizador. Calcula la cantidad necesaria para el tamaño de estante, y divídela en dos. Mezcla la primera mitad en el contenedor plástico y, sin demorar, vierte en el marco. Deja asentar unos diez a quince minutos, para que adquiera cierta resistencia, y apoya ahora las fotografías o las piezas que quieras conservar, haciendo una suave presión pero sin hundirlas en la preparación. Mezcla la segunda mitad de la resina y vierte, con cuidado y asegurándote de cubrir las fotografías e incrustaciones de manera pareja y uniforme. Puedes hacer más de un marco e ir trabajando en serie, para hacer todos los estantes en el mismo día.
Deja que la resina se seque y tome firmeza toda la noche. Al día siguiente, con la perforadora haz los cuatro huecos en las esquinas de los estantes. Coloca el pie y la primera tuerca con arandela en los cuatro caños roscados, y haz pasar los caños por la perforación del primer estante. Fija con arandela y tuerca, y repite todo el procedimiento, colocando entre uno y otro estante un trozo de caño o manguera para cubrir el sector de caño roscado que da la separación de los estantes.
