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Versión para imprimir del artículo Dónde y cómo ubicar el televisor en la sala. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Por lo general, la sala es el ambiente de la casa en el cual se coloca el televisor, ya que es uno de los lugares que toda la familia comparte. Aunque presente, el televisor no debe ser el protagonista de la decoración, ni el punto focal. Con la aparición de los televisores LCD, es mucho más sencillo incorporarlos a la decoración sin que se conviertan en un estorbo.
Muchos muebles modulares vienen con espacio dedicado para el televisor. Por lo general, este espacio está en el centro del mueble, y a los costados encontramos estantes para libros y objetos decorativos. La base suele ser una línea de cajones o puertas para guardado. En algunos casos, estos muebles vienen provistos de una tapa frontal, que puede correrse para ocultar la pantalla cuando no estamos usando el televisor.
Otra solución más sencilla, económica y que, incluso, podemos hacer nosotros mismos, es un tablero de madera, pintado y con ruedas, convertido en mesa para apoyar el televisor. Es bueno que sea lo suficientemente amplia y gruesa como para soportar incluso otros equipos electrónicos, cajas de dvds, o revistas.
Si no disponemos de mucho espacio libre, lo más práctico es colgar el televisor de la pared. Para que no quede como un elemento aislado, podemos complementar colocando alrededor cuadros de tamaño o forma similares, o nichos con esculturas o adornos. Esta solución también es buena para los dormitorios, ya que nos permite poner el televisor frente a la cama, aunque no tengamos un mueble donde apoyarlo.
Si queremos poner un televisor en el comedor diario, colgarlo en un sitio donde no obstaculice el paso es la solución ideal. En este ambiente, el tamaño del televisor debe ser algo más pequeño que el de la sala o el dormitorio, ya que también el área del ambiente suele ser menor.
Es importante tener el cuenta el efecto de la iluminación: hay que evitar las luces directas, tanto sobre la pantalla como sobre los ojos de los espectadores. También nos fijaremos en los reflejos que se puedan producir por rebotes de la luz sobre muebles o espejos.
