Una manera excelente de decorar la cocina y tener a mano especias frescas para aderezar los más variados platillos, es colocar sobre una ventana macetas con hierbas aromáticas.
Los apasionados de la cocina sabrán que no hay nada más sano y delicioso como las especias frescas, y quienes gusten de la decoración, concordarán en que es una idea excelente para darle un aspecto agradable. Vamos a ver a continuación algunos consejos para saber qué hierbas plantar para tener en la cocina.
Tienes muchas opciones para elegir los contenedores y macetas apropiados donde colocar las hierbas aromáticas. Elígelos en base al estilo de la cocina y, si manejas un presupuesto apretado, opta por el reciclaje de latas, recipientes y envases.
Colócalos en un sitio donde reciban 6 horas del sol al día y rótalos periódicamente para asegurar un crecimiento parejo.
El Romero se propaga por semillas. No necesita de riego abundante, pero debes plantarlo en un contenedor muy grande y, cuando haya alcanzado gran volumen, trasplantarlo al jardín.
Además de aderezar tus comidas, puedes beberlo en infusión (es estimulador del apetito y digestivo).
Tener una planta de orégano en la cocina te permitirá aderezar las comidas con la especia fresca, y decorar el espacio, pues esta hierba da unas hermosas flores rosadas o púrpuras.
El romero necesita de mucha luz, un recipiente con buen drenaje y riego diario. Se multiplica por división de raíces, por lo tanto, una vez que consigas tener una planta de buen tamaño, puedes hacer otros plantines para colocar en otros contenedores.
El hinojo es otra buena opción para decorar la cocina, y es una hierba que se adapta muy bien a las condiciones del interior de la casa. Debes plantar las semillas en primavera, y conseguirás una linda hierba de flores amarillas, cuyas hojas y ramas tiernas se pueden consumir en ensaladas. Al igual que el orégano, necesita de un buen drenaje y de abundante exposición al sol. Cosecha los frutos, especias de sabor anisado, en los meses de otoño.
El perejil crece espontáneamente. Necesita de tierra rica en hummus, mucha humedad y sombra para mantenerse lozano y verde. Una manera de acelerar la germinación es colocar las semillas en agua tibia antes de sembrarlas.
Dispón varios contenedores de perejil, para que nunca te falte esta exquisita hierba para aderezar las comidas.
Esta hierba crece muy bien en contenedores, siempre que tenga mucha claridad y sol directo. La única precaución que debes tomar es podar las ramas superfluas antes de la floración, para que crezca fuerte y sano. Para ello, corta las ramas inferiores si quieres que la planta crezca en altura, o las ramas superiores, si quieres que crezca en volumen.
Siembra las semillas en otoño y divide las matas en invierno para crear más plantines.
Es muy útil poder tener cebolla de verdeo en la cocina, además de que es una planta de bonita y estética para la decoración. Necesita de tierra liviana rica en hummus, sombra parcial y riego diario. Para consumir, corta algunas ramas a 3 o 4 cms. del suelo y espera a que se desarrolle la planta para seguir quitando hojas.
El cilantro se adapta bien a la vida en macetas, siempre y cuando utilices un contenedor muy grande, pues sus raíces necesitan de un buen espacio para desarrollarse. Al igual que el eneldo requiere de podas periódicas y mucha luminosidad.
Siémbralo en tierra liviana y fértil, a inicios de la primavera.
Tener tomillo en el interior de la cocina te permitirá disfrutar de su agradable aroma en todo momento.
Siembra las semillas, o divide otra planta para generar plantines, y procura no quitar hojas ni ramas durante su primer año de vida.
Para cuidarlo, procura una maceta honda con buen drenaje y ponlo en un sitio de media sombra, resguardado del viento y el frío. Después de cierto tiempo el tomillo pierde su aroma, y por ello debes dividirlo uno vez al año o cada dos años, para hacer nuevas plantas.