El arte japonés de componer conjuntos de roca permite crear espacios naturales que generan calma, inspiran y emocionan, pues algunos jardines zen son verdaderas obras de arte.
Componiendo estos elementos naturales con ideas del manual japonés Sakutei-Ki, se pueden crear jardines de gran belleza.
El jardín japonés puede ser representado en cualquier tamaño. Un ejemplo de ello son los jardines en miniatura (usados en los escritorios o en mesas bajas de té) en comparación con los grandes espacios de templos budistas, castillos o casas privadas.
Las piedras o rocas son los elementos principales del jardín japonés. La roca representa una isla o una montaña, en base a uno de los simbolismos que ve el diseño de archipiélago en sus componentes. Las rocas en el jardín japonés son llamadas “islas”.
Las islas son un conjunto de piedras que se colocan en el jardín, y se diferencia de cualquier otra piedra en que son rocas de origen volcánico, o rocas erosionadas de aspecto pulido que se emplazan siguiendo ciertos principios.
La composición de piedras y rocas se puede hacer siguiendo las enseñanzas del Sakutei-Ki, texto japonés que data del siglo XII y es considerado el texto de jardinería más antiguo.
El Sakutei-Ki aconseja representar un mar que fluye entre las montañas y no un vasto océano (siguiendo el simbolismo de que el “mar” es el estanque, el césped, la arena rastrillada y las “islas” son las piedras o el conjunto de piedras).
El Sakutei-ki recomienda no comenzar por la idea y luego buscar las piedras o rocas, sino al revés, trasladando las piedras y rocas al jardín y luego idear el diseño inspirándose en el lugar.
Recomienda poner algunas rocas de pie, erigidas, y también algunas tumbadas.
Primero se colocan las piedras principales, de grandes dimensiones y luego las más pequeñas.
En las partes llanas, se ponen las redondeadas, aisladas de los conjuntos de piedras en los cuales se utilizan las ladeadas, apoyándose unas contra otras. Las de diseño aplanado pueden ir una encima de la otra en conjuntos impares.
La orientación de las mismas es importante: no se deben colocar de forma que sus bordes coincidan con los ejes de la estructura de la casa.
Estas estructuras de piedras pueden ser funcionales (senderos, puentes) o formar con ellas esculturas o colinas.
Siguiendo estas recomendaciones del Sakutei-Ki se pueden hacer bellas composiciones de piedra y roca para hacer un jardín de estilo japonés. En jardines ya estructurados con canteros de flores, juegos y muebles de exterior, estas ideas se pueden aplicar en un rincón del jardín, ya sea alrededor de un estanque, en una montaña de piedras y plantas, y también en los jardines interiores o de invierno.
